Ha terminado la LSWC

Finalmente ha terminado la LSWC, y debo decir que estoy muy sorprendido.

Muy sorprendido porque ha sido lo que debería ser: un encuentro de la patronal del software libre, donde hemos podido reunirnos los empresarios a hacer alianzas para atacar nuevos mercados.

Estoy muy contento tanto en los contenidos, como en las alianzas a las que he llegado para atacar nuevos mercados. Ha sido tremendamente útil y provechosa.

Solo he echado en falta que arrancáramos el evento con una actividad tipo “speed networking” al que nos pudiéramos haber apuntado los participantes. Hay muchos jugadores con los que podría haber contactado para tantear posibles acuerdos, y no he podido hacerlo por falta de un esquema estructurado para ello.

Como conclusión, las empresas de software libre han demostrado que saben volar de forma independiente, y que son capaces de operar como cualquier patronal empresarial sin influencias de la política. Empresas maduras capaces de organizarse y plantear soluciones de cara al sector privado. Finalmente, en lugar de repartir camisetas y tacitas entre alumnos de instituto, tenemos un formato para plantear sinergias útiles (casi todos en este sector somos demasiado chicos, casi todos hacemos cosas distintas, y casi todos podemos colaborar para hacer acciones conjuntas)

Constituido el Consejo General de Colegios de Ingeniería en Informática

Se ha constituido el Consejo General de Colegios de Ingeniería en Informática.

Es una muy buena noticia, ya que finalmente los Ingenieros en Informática tenemos una representación única de ámbito nacional para servir de interlocutor válido con el poder político. Hasta ahora la excusa que el poder político ha empleado para ningunear la Ingeniería Informática y mantener a sus profesionales fuera de los ámbitos consultivos y decisivos ha sido que no había un Consejo General de Colegios de Ingeniería en Informática que sirviera como interlocutor.

Desgraciadamente llega tarde: el desastre que se ha hecho en los estudios universitarios de informática con la excusa de Bolonia ya está hecho, y no podremos arreglarlo hasta dentro de muchos años. Esto supondrá un daño social, al no ofrecer a la sociedad y a los estudiantes los estudios que podríamos estar ofreciendo, y dar lugar a formaciones «creativas» (Ingeniero en Informática multimedia, y tantas cosas análogas que entrarán en el mercado laboral). Otras ingenierías que sí han contado con organismos colegiados organizados han podido defenderse de las reformas boloñesas con mejor o peor suerte (no escucharemos hablar de un «Ingeniero Industrial de Chiringuitos de Playa», ni nada parecido). Pero no ha sido nuestro caso.

Me consta que el Colegio de Ingenieros en Informática ha tenido un gran éxito de colegiaciones (que es lo que realmente importa); y que la creación del sindicato de ingenieros en informática ha sido un éxito, algo que era importante porque ha habido cosas que no se han podido realizar por razones legales siendo colegio, y como sindicato no nos pueden prohibir.

Poco a poco estamos consiguiendo derechos vedados para nosotros que sí tienen otros españoles. La libertad de asociacionismo ha sido complicada, la libertad de sindicación la hemos tenido que llevar de forma muy discreta. Ahora, a por la representatividad que deberíamos tener.

Más información aquí: Nota de prensa del Consejo General de Colegios de Ingeniería en Informática